Lean Six Sigma: la metodología que cambiará tu entorno laboral

Lean Six Sigma: la metodología que cambiará tu entorno laboral
Cuando hablamos de eficiencia laboral, pensamos en lo que podemos mejorar de manera interna, como el ahorro de ciertos recursos, que nos ayudarán a optimizar tareas, pues sabemos que la eficiencia es la capacidad de un empleado de usar lo mejor posible sus recursos para conseguir sus objetivos. Alguno de estos procesos podrían llevar un tiempo considerable al adaptarlos, pues el cambio podría no ser notorio y en algunos casos tardado. Sin embargo, existe una metodología enfocada en el tema y que ayudará a resolver esta clase de problemas innecesarios: Lean Six Sigma.
¿Qué es el método Lean Six Sigma?
Lean Six Sigma es un enfoque sistemático y disciplinado para mejorar la calidad y la eficiencia de los procesos empresariales. Combina los principios Lean, que se centran en la eliminación de desperdicios y la mejora continua, con los principios Six Sigma, que se centran en la reducción de la variación y la mejora de la calidad. Puede parecer un poco enredado, pero cuando termines de leer este blog, te darás cuenta de que no lo es. Para esto, iremos desglosando poco a poco la información.
Para empezar, es importante que sepas que esta metodología se basa en un enfoque en cinco fases, conocido como PDCA (Planificar, Hacer, Verificar y Actuar). Cada fase tiene su propio conjunto de herramientas y técnicas para lograr los objetivos del proyecto. A continuación, describiré cada una de ellas, así como también las herramientas y técnicas que las componen:
Planificar: El enfoque principal de Lean Six Sigma
Es la primera fase del enfoque y es un paso crítico para asegurar el éxito de cualquier iniciativa de mejora continua. La primera parte es definir el problema que se quiere abordar, ya que aquí se identifica el área del proceso en la que se produce el problema.
Así como el impacto del problema en el negocio, el alcance de la iniciativa y las expectativas de los stakeholders.
Cuando se ha definido el problema, el siguiente paso será establecer los objetivos, los cuales serán específicos, medibles, alcanzables, relevantes y deberán estar acotados en el tiempo. Aquí también se forma un equipo, el cual tendrá un líder de proyecto y debe incluir representantes de todas las áreas involucradas en el proceso.Más tarde se identificarán las posibles soluciones y después de un estudio preciso, se elegirá la mejor opción. Esto debe hacerse considerando factores como el impacto en el negocio, la facilidad de implementación y el costo-beneficio.
Finalmente, se elabora un plan de acción, el cual define los roles y responsabilidades, los plazos y los recursos necesarios para la implementación, para pasar al siguiente proceso.
Aquí se recopilan datos para comprender el desempeño actual del proceso y de esta manera, establecer las métricas clave. Se crea un mapa de flujo de valor para comprender el flujo de trabajo actual y se realiza un análisis de capacidad para determinar si el proceso está funcionando dentro de los límites especificados. Las herramientas y técnicas utilizadas en esta fase incluyen la recopilación de datos, la creación de gráficos de control, la determinación del tamaño de la muestra y el análisis de la capacidad.
Hacer: ¿En qué consiste la segunda fase?
Es aquí cuando se implementa la solución anterior, gracia sal plan detallado antes elaborado. Es importante que sepas que en esta parte también se recopilan datos, para saber si los objetivos se están logrando. También se realiza un monitoreo de este proceso, con la finalidad de saber si la solución se está implementando de manera correcta.Muchas veces estos procesos implican cambios, por lo que es relevante capacitar al personal involucrado para que los nuevos procesos se puedan implementar de manera efectiva.
Para esto también es crucial documentar todo el proceso, el cual va desde los nuevos procedimientos, las instrucciones de trabajo y las nuevas herramientas utilizadas. Esto último con el fin de evaluar los resultados.
Verificar: ¡Lean Six Sigma comienza a tomar forma!
Una vez llegada la mitad de todo el enfoque, es necesario evaluar y analizar los datos que preceden el paso anterior, ya que con ellos se pueden ejecutar pruebas de hipótesis, para determinar si las mejoras observadas son estadísticamente significativas.
Posteriormente, el equipo de proyecto debe validar la solución implementada para asegurarse de que se mantendrá a largo plazo. Esto implicaría realizar revisiones adicionales o pruebas para confirmar que la solución es efectiva y sostenible.
Aquí también es importante documentar el proceso, así como los resultados obtenidos, para finalmente preparar un informe. El anterior debe incluir una descripción detallada de las mejoras logradas, los datos usados para evaluar los resultados y las conclusiones derivadas del análisis.
Actuar: La última fase de Lean Six Sigma
En la cuarta y última fase de esta metodología, finalmente se implementa la solución de lleno, donde también se establecen controles. Esto con el fin de asegurarse de que los resultados se están logrando.
También es fundamental realizar un seguimiento completo, el cual podría implicar la realización de auditorías o revisiones periódicas para evaluar el desempeño del proceso y detectar cualquier problema o área de mejora. De igual forma, se comunicarán los resultados a la gerencia o personas involucradas.
Ahora que ya tienes más nociones sobre como funciona una certificación Lean Six Sigma, será relevante que conozcas parte del origen, pues hay diferencias que aún deben resaltarse. De igual forma, una de las actitudes que son necesarias para comprender y mejorar la eficiencia de los espacios es el liderazgo, por lo que te invitamos a leer nuestro blog anterior Liderar y dejarse liderar: la clave del liderazgo continuo.
¿Qué es el Six Sigma y cómo funciona?
Six Sigma es un enfoque de gestión de calidad que se centra en reducir la variación y mejorar la calidad de los procesos empresariales. Sus orígenes se centran en la década de 1980 por Motorola y se popularizó por empresas como General Electric y Toyota.
El nombre “Six Sigma” se refiere al objetivo de reducir la variación en un proceso hasta el punto en que hay menos de 3,4 defectos por millón de oportunidades (DPMO). Esto se logra mediante la aplicación de un enfoque sistemático y disciplinado para identificar y eliminar las causas raíz de los problemas en un proceso, el cual veremos más adelante.
Si bien la certificación Lean Six Sigma se basa en el ciclo de mejora continua que vimos en la parte anterior de este blog y que se describió de manera detallada, la metodología Six Sigma también incluye otras herramientas y técnicas, las cuales son las siguientes:
El enfoque de pensamiento estadístico
En esta parte inicial, Six Sigma se basa en la utilización de herramientas estadísticas para analizar los datos y tomar decisiones basadas en hechos. Esto incluye el uso de gráficos de control, diagramas de Pareto, análisis de regresión y diseño de experimentos.
Calificación de cinturones
El sistema de calificación de cinturones de Six Sigma es similar al de las artes marciales, pues se utilizan los cinturones de color amarillo y verde, hasta llegar a la cinta negra. Se emplean para clasificar la experiencia y el nivel de capacitación de los profesionales de Six Sigma.
La satisfacción del cliente
Six Sigma se centra en la satisfacción del cliente y en la mejora de la calidad del producto o servicio para satisfacer las necesidades y expectativas del mismo, ya que es una parte importante para alcanzar el éxito. Lo rodean 4 pilares de valor como los son: Cadena de Valor, Flujo, Demanda y Perfección.
El enfoque en la mejora continua
Finalmente, la metodología Six Sigma se enfoca en la mejora continua, lo que significa que se busca mejorar constantemente los procesos empresariales y eliminar los desperdicios para aumentar la eficiencia y la eficacia de la organización.
En resumen, Six Sigma es un enfoque de gestión de calidad que se centra en reducir la variación y mejorar la calidad de los procesos empresariales. Se basa en un enfoque sistemático y disciplinado, y utiliza herramientas y técnicas estadísticas para analizar los datos y tomar decisiones basadas en hechos. Además, la certificación Six Sigma ya es un estándar en la industria que ofrecer este tipo de certificaciones, por lo que se enfoca en la satisfacción del cliente y en la mejora continua de los procesos empresariales.
¿Cuál es la diferencia entre Lean y Six Sigma?
unque Lean y Six Sigma son metodologías de mejora de procesos empresariales, se centran en objetivos ligeramente diferentes y utilizan enfoques y herramientas diferentes. A continuación te explicamos la diferencia:
Lean se centra en eliminar los desperdicios y mejorar la eficiencia de los procesos empresariales. Se originó en la industria automotriz japonesa y se centra en la mejora continua, la eliminación de actividades sin valor agregado y la reducción de los tiempos de ciclo de producción. El objetivo principal de Lean es reducir el tiempo y los costos de producción, aumentar la eficiencia y mejorar la satisfacción del cliente.
Six Sigma, por otro lado, se centra en la reducción de la variación y la mejora de la calidad de los procesos empresariales. Se originó en la industria manufacturera estadounidense y se basa en el uso de herramientas y técnicas estadísticas para reducir los defectos y mejorar la satisfacción del cliente. El objetivo principal de Six Sigma es mejorar la calidad del producto o servicio y reducir los costos asociados con los defectos y errores.
A pesar de que Lean y Six Sigma se centran en objetivos diferentes, ambos enfoques pueden ser complementarios y pueden combinarse para lograr resultados aún mejores en la mejora de procesos empresariales. De hecho, la metodología Lean Six Sigma combina herramientas y técnicas de ambas metodologías para crear un enfoque híbrido que se enfoca tanto en la eficiencia como en la calidad. ¿Te diste cuenta de ellos?
Finalmente, mientras una se encarga de eliminar defectos y mejorar los procesos para que se puedan aumentar las ganancias, la otra elimina los desperdicios que limitan un trabajo estandarizado y de calidad.
¿Cómo se aplica el Lean Six Sigma?
Debes saber que para aplicar esta metodología se tiene que llevar a cabo un proceso de capacitación con instructores expertos en el tema, conocidos como Black Belts y Master Black Belts.
Estos instructores cuentan con los estudios adecuados para cumplir con la certificación en un tiempo estimado.
Podrás convertirte en un agente del cambio gracias a las bases que se establecerán para la mejora continua. Comenzarás a liderar las mejoras de todo el proceso y notarás que tu forma de hablar cambiará, pues podrás comunicarte en el lenguaje Lean Six Sigma.
Posteriormente, desarrollarás la habilidad de leer cada uno de los procesos e identificarás más áreas de mejora y oportunidad.
¿Te gustaría planear y liderar más iniciativas con equipos multifuncionales? Esto será posible, sumando que podrás presentar resultados sostenibles que impulsen a la productividad.
Una vez llegada la fase final, podrás ser partícipe de la dirección estratégica de la organización, mediante la influencia que tendrás, gracias a todo el conocimiento previo. Lograrás resolver problemas técnicos profundos y lograrás conectar con un mayor alcance.
Desde luego, la aplicación de esta metodología se lleva por fases divididas en horas. Ahora que si quieres profundizar más en este tema antes de convertirte en un experto, te invitamos a leer nuestro blog anterior Pensar y actuar desde la perspectiva estructural: el rol del LSS Black Belt.
Conclusiones finales sobre la certificación Lean Six Sigma
En un mundo tan competitivo como el actual, es indispensable contar con mejoras que permitan conseguir los objetivos que las organizaciones o empresas se ponen en mente. Sabemos que mejorar los procesos internos conlleva una gran labor y sobre todo una responsabilidad importante para lograrlo. Si bien es cierto que no llega de un día para otro, la clave estará en la constancia y también en la mejora continua.
Esto último es fundamental para enfrentar los retos que día a día aparecen dentro de un esquema laboral alineado a cumplir con los más grandes estándares de calidad.
Gracias a una certificación Lean Six Sigma, se logrará identificar aquellos “baches” o “topes” que son innecesarios y que no aportan valor alguno a nuestro entorno. Gran parte de esta metodología también hace referencia a centrarse únicamente en lo primordial y también a sumar la satisfacción de un cliente, ya ellos atmbién forman parte de esta cadena de eficiencia.
Lean Six Sigma logra englobar todos y cada uno de los aspectos que son relevantes para el cumplimiento de las calidades del primer mundo, donde la importancia de la eficiencia toma vida para eliminar lo que no se necesita y lo que no aporta; dónde la mejor forma de llegar al éxito, empieza por encontrar el problema, medir la situación actual, analizar la causa, mejorar le proceso y mantener un control de cada uno de ellos, sin dejar de aprender, ya que esto nos permitirá mejorar lo que ya se ha implementado.
¿Estás listo para convertirte en un líder y optimizar tu mundo laboral?